Mayor parte de lo que sabemos es implícito. Llevamos ese conocimiento a la consciencia, volviéndolo explícito, solo cuando lo requieren las circunstancias, como cuando nos sorprendemos o tenemos que reflexionar sobre algo de manera deliberada.
Mayor parte de lo que sabemos es implícito. Llevamos ese conocimiento a la consciencia, volviéndolo explícito, solo cuando lo requieren las circunstancias, como cuando nos sorprendemos o tenemos que reflexionar sobre algo de manera deliberada.